miércoles, 28 de octubre de 2009

LA ENERGIA LUNAR
En astrología cada planeta del sistema solar, es comprendido como parte del mismo conforme a la función específica que cumple en él. Algunos conocedores del tema dicen que la energía representada por cada uno de los planetas, es una función de nuestra siquis.
Si cada planeta es la función de un sistema, en lo que respecta a la luna, podemos considerar que en el mundo externo, tiene que ver con la madre, el hogar, el alimento, el huevo, la cueva y en el mundo interno tiene que ver con la afectividad, con la emoción, con la simbiosis, con la Gran Madre.
Si logramos comprender cual es la función sistémica de la luna podremos prescindir de esta aparente disociación de externo o interno u objetivo y subjetivo, adentrándonos en el verdadero simbolismo de la energía.
Es por ello que voy a tratar de expresar, lo relativo a la luna, que luego deberá ser vivenciado por cada uno, siempre sin perder de vista que la mirada astrológica debe lograr unir, aquello que a la simple percepción aparece escindido
Como la intención es acercarnos a comprender la energía lunar, no podemos prescindir de hablar de la energía saturnina, es decir del Sr. Saturno, el Sr del Umbral. No existe una sin la otra; así como se genera el embrión de lo que después será un pollito, a partir de la sustancia (el huevo propiamente dicho), la parte blanda, la parte lunar; es indispensable la existencia de la cáscara para proteger esa nueva vida que se está formando, la parte saturnina.
Si bien tratamos de pensarla diferenciándola, en realidad nadie puede suponer la existencia de un huevo sin su correspondiente cáscara.
Es bueno no perder de vista que la Luna es imposible de ser pensada sin relacionarla con el Saturno
Pero yendo específicamente al tema que nos convoca, les cuento que las principales funciones de la Luna, las que le dan sentido a su lugar en el mapa del sistema solar y por ende en nuestro mapa astrológico, son: Suministrar sustancia, es decir suministrar la materia prima amorfa que es sustancia vital, a partir de la cual dada la gran plasticidad, vitalidad y docilidad de lo lunar, se logra la pretendida forma y Constituir un ámbito de protección indispensable para que esa forma tenga posibilidades de ser.
Par lograrlo, la luna, que no tiene luz propia, refleja la luz del sol, siempre depende de un impulso externo para poder llevar a cabo su función. Su cualidad refleja/pasiva no le permite ser generadora de la iniciativa, pero resulta indispensable para llevar adelante el proceso. No hay proceso, en el que exista sustancia, que pueda llevarse a cabo sin la participación de la luna.
La luna tiene una gran vitalidad, capacidad de fecundación y reproducción, siempre repitiendo la estructura adquirida, ya que carece de la capacidad de modificar el patrón en que ha quedado fijada.
Es esta capacidad la que hace que la luna atesore todo lo que se imprime en ella y genere los surcos que se abren como profundas huellas de costosa remoción.
Con esto y por ello pretendo que se entienda que cuando interpretamos la luna en una lectura de una carta natal, según el signo en que se encuentra, la casa y los aspectos que determinan su configuración, podemos leer gran parte de las problemáticas que cada uno de nosotros, viene a trabajar a esta vida. Esa interpretación trata de arrojar claridad sobre esa temática básica, permitiéndonos comprender gran parte de nuestras maneras de actuar, repetidas y displacenteras.
Mediante la lectura, podemos abordar las profundas huellas que las influencias o los sucesos han dejado en nuestra siquis, afectivizando esas sensaciones y constituyendo la manera que tenemos de refugiarnos, a pesar de que esa repetición, resulta regresiva y dolorosa.
Constituimos una necesidad a partir de esa energía lunar, que nos lleva a accionar a partir de la carencia, logrando que actuemos desde lo que necesito y no desde lo que quiero.
Lo que se necesita no se quiere.
La Luna como mecanismo de repetición, y en su afán de cuidar y conservar, siempre trata de repetir en forma automática, aquello que se gestó a partir de una necesidad de cuidado. Pero eso que en su momento sirvió como protección, con el tiempo se transforma en una trampa que impide nuestro crecimiento personal y genera situaciones destinales dolorosas.
Se trata de una energía que funciona tan automáticamente, que podríamos decir que se dispara y que si bien en principio nos sirve para protegernos, el uso inconsciente de la misma, nos impide salir a transitar el camino hacia el sol, el camino hacia la conciencia
Muchas veces hemos escuchado decir o dicho que alguien “está en la luna” o “vive en la luna”,
Eso que dicho así nomás parece una simple forma de decir algo, cobra un gran sentido desde lo astrológico, en realidad estamos refiriéndonos a alguien que está en un estado de inconsciencia, del que prefiere no salir porque en él se siente cómodo, porque le resulta un lugar seguro.
Siempre recordando que la vida es el camino de la conciencia, podemos decir que la vida es el camino de la luna al sol, el camino desde la energía inconsciente, instintiva, automática de la luna, a la energía consciente de lo que nos corresponde ser, es decir nuestro sol
.Veamos algunas breves características de nuestras posibles lunas natales, conforme al elemento, en que se encuentran.
Luna en Fuego: son comunes sus reacciones arrebatadas, los ataques de ira son breves pero intensos.
Luna en Tierra: el lema es el Aguante. La resistencia es la que los lleva a insistir en sus propósitos
Luna en Aire: Sus estados emocionales siempre necesitan ser explicados con palabras o mediante un gran despliegue motriz
Luna en Agua: Responden con un humor muy cambiante que va desde el retraimiento hasta el estallido emocional.
Esto que está dicho de una manera tan sintética sólo pretende ser una aproximación para entender, de qué estamos hablando. En próximos encuentros les contaré sobre las distintas interpretaciones de cada una de las lunas, desde las lunas en el signo de Aries, que nos lleva a vivir defendiéndonos, hasta la luna en el signo de Piscis que nos hace proclives a la victimización.
Conocer nuestra luna y su mecanismo de funcionamiento nos permite dar los primeros pasos para poder “salir de la luna”, cuando ya tenemos la edad que lo exige. A partir de tomar contacto, por lo menos racionalmente con el mecanismo, podremos ir compulsando nuestras actitudes o nuestros pensamientos con lo que sabemos de ese actuar automático, entonces, paso a paso, iremos tomando conciencia de su manera de funcionar y podremos sutilizar ese funcionar displacentero.
Lamento haber abandonado este espacio por tanto tiempo, es mi intención primero, actualizarlo y luego seguirlo permanentemente, sobre todo para que al que le interese le sirva para lo que lo busca.
Es por eso que además sería interesante que si alguien lestá interesado en algo especial o tiene alguna sugerencia, la comunique para ver qué podemos hacer al respecto.
Mi idea es colocar en el blog todos aquellos temas que sean útiles para este maravilloso, pero duro, camino del autoconocimiento. Pondré videos o música que me parezca que pueden resultar útiles, para el fin propuesto, así como artículos, incluso los de propia producción, que aparecen publicados en la Revista DO, la misma que pertenece al grupo Paradigma, en su versión programa de radio y su programa de TV.
Ojalás cumpla algo el fin propuesto, a la vez me vendría muy bien algunas críticas.

Durante los dos próximos anteriores fines de semana he tenido el placer de asistir a un Congreso Internacional, Virtual de Astrología.
En él han participado todos esos nombres importantes de este mundo, autores de libros y referentes en cada materia.
Realmente ha sido una experiencia muy linda, placentera, rica en contenidos de aprendizaje y en situaciones de compartir con un gran grupo de personas, muy interesadas en la Astrología que comparte inquietudes, conocimientos y proyectos.
Y hasta nos dieron un Certificado que atesoraré

PARA QUÉ SIRVE LA ASTROLOGÍA